¿Depresión postvacacional?
Generalmente, el último día de vacaciones no tenemos ganas de volver a casa, hemos pasado unos días relajados y disfrutando de esas cosas que generalmente no podemos porque las obligaciones no nos lo permiten. Una vez volvemos a casa, ponemos la televisión empezamos a oír diferentes informaciones sobre la depresión postvacacional, un concepto que no está clasificado como trastorno en el DSM V (qué es una de las clasificaciones diagnósticas que utilizan los psicólogos), pero lo cierto es que cuando oímos los síntomas muchas personas nos identificamos con ellos.
¿Cómo estaba yo antes de irme de vacaciones?
Desde mi punto de vista, si una vez nos incorporamos a nuestra rutina habitual, no llegamos a encontrarnos bien anímicamente y no somos capaces de disfrutar de nuestra rutina, la preguntas que nos debemos hacer es: “¿Cómo estaba yo antes de irme de vacaciones?” Lo más seguro es que la respuesta sea que la situación de antes de las vacaciones era parecida a la que tenemos una vez estas han terminado.
Esto se debe a que muchas veces, en vacaciones nos olvidamos de nuestros problemas habituales, el cambio de contexto y de rutina, nos ayuda a descansar de los problemas, pero una vez volvemos esos problemas no han desaparecido porque los problemas no desaparecen por si solos. Cambiar de país, de trabajo o marcharse un tiempo más o menos largo de vacaciones, pueden ayudarnos a enfrentarnos a ellos, pero una vez abrimos las maletas, nos damos cuenta de que los problemas se han venido con nosotros allí a donde nos hemos ido. Lo que ocurre es que el origen de los problemas se encuentra en como nosotros funcionamos frente a las diferentes situaciones que se nos presentan en la vida. Las diferentes formas en que nosotros nos enfrentamos a dichas situaciones las hemos aprendido a lo largo de nuestra vida y esto, no cambia cuando nosotros nos cambiamos de lugar, de forma que, cuando regresamos a nuestra vida cotidiana aparecen de nuevo.
Solución: La terapia online o presencial
Por eso, en el momento en que vuelvas de vacaciones y los problemas que no te dejan ser feliz reaparezcan, habrías de plantearte que la terapia psicológica es opción para solucionarlos y así, tener un nuevo espacio extra en tu maleta en tus siguientes vacaciones, además de que podrás disfrutar de tu vida en cualquier circunstancia.
No dejes que el sindrome de la depresión postvacacional te impida ser feliz. Si necesitas más información contactanos.